BOGOTÁ, Colombia – El presidente de la Pontificia Academia para la Vida dijo que los grupos católicos deben usar la misericordia y la compasión en las campañas contra el aborto mientras buscan “transformar” a quienes no apoyan los derechos de los niños por nacer.
El arzobispo Vicenzo Paglia habló durante la segunda reunión por internet de la Red Panamericana por y para el Derecho a la Vida, cuando los miembros de la audiencia le preguntaron qué podría hacer la iglesia para contrarrestar a los políticos que dicen ser católicos pero apoyan el aborto y si una solución es excomulgarlos.
El arzobispo respondió que si bien apoyar el aborto ciertamente va en contra de la doctrina católica, no es suficiente simplemente “condenar el pecado”.
“Los miembros de nuestra comunidad cristiana deben entender que nuestro mandato es salvar, más que condenar”, dijo el arzobispo. “Convertir en lugar de excluir. Y transformar en vez de eliminar”.
“Como iglesia, necesitamos tener una mayor capacidad para influir en aquellos que están en error”, dijo el arzobispo Paglia, quien pronunció una sesión sobre las lecciones aprendidas de la encíclica de San Juan Pablo II, “El Evangelio de la vida”.
La Red Panamericana por y para el Derecho a la Vida es una coalición de académicos, sacerdotes, miembros de la iglesia y grupos antiaborto, creada en 2018. Sus miembros se reúnen regularmente para discutir formas en las que las políticas pro-vida pueden ser apoyadas en América Latina y el Caribe.
En el encuentro en línea, Mons. Paglia dijo que a la hora de defender la vida, la iglesia enfrenta varios desafíos que incluyen participar en la formación de nuevos códigos de bioética y en el debate sobre cómo regular las nuevas tecnologías.
Dijo que la iglesia debe defender los valores universales mientras lucha contra los gobiernos que promueven el relativismo ético e incluso se involucran en un comportamiento “dictatorial”.
“Ante el individualismo que está contagiando a la sociedad como un virus, la iglesia debe promover la fraternidad universal”, dijo el arzobispo.
El arzobispo Paglia dijo que la iglesia también debe dirigir su atención a los ancianos mientras se esfuerza por promover la vida. Dijo que en vez de ser enviados a instituciones y residencias, “los ancianos tienen derecho a quedarse en casa, apoyados por su familia, comunidades cristianas y gobiernos locales”.
Añadió que la atención adecuada a los ancianos debe considerarse parte de la lucha contra la eutanasia.
“No solo se lucha contra la eutanasia citando las Escrituras”, dijo el arzobispo, “sino teniendo a los ancianos en casa y ayudándolos a vivir bien hasta el final”.
Jesús David Vallejo, profesor de bioética y uno de los fundadores de la Red Panamericana por y para el Derecho a la Vida, dijo que la intervención del arzobispo Paglia en el encuentro por internet le recordó a los católicos que “la vida debe defenderse desde la concepción hasta la muerte natural”.
El encuentro fue facilitado por CELAM, el consejo episcopal latinoamericano.
Por Manuel Rueda