WASHINGTON—Durante más de 50 años, la colecta anual de los obispos de Estados Unidos para la Iglesia en América Latina ha sido un signo de solidaridad entre los católicos de los Estados Unidos, y los de América Latina y el Caribe.
Esta colecta–que financia programas pastorales, formación de seminaristas y religiosos, y ministerios juveniles y familiares–tendrá lugar en las misas del fin de semana de enero 25-26 en muchas diócesis de los Estados Unidos. Sin embargo, las diócesis podrían elegir una fecha distinta para la colecta para evitar conflictos con actividades locales.
“El amor de Cristo nos impulsa a compartir nuestra fe y a apoyar a todas las personas que anhelan acercarse más a Jesús”, dijo el obispo Octavio Cisneros, auxiliar de Brooklyn, Nueva York, presidente del subcomité para la Iglesia en América Latina de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos.
“La colecta para la iglesia en América Latina expresa nuestra solidaridad y amor por el pueblo latinoamericano”, dijo el obispo en una declaración del 21 de enero.
En nombre del subcomité, el obispo Cisneros expresó su “continua gratitud hacia el pueblo de los Estados Unidos que apoyan la colecta generosamente cada año, y, a través de ella, a nuestros hermanos y hermanas de toda la región”.
Algunos ejemplos de programas que se benefician de la colecta de USCCB incluye a la organización sin fines de lucro Cáritas Argentina, “que capacita a más de 150 jóvenes católicos para vivir su fe en servicio de quienes son pobres y están excluidos de la sociedad, formándolos para ministerios pastorales para evangelizar a sus comunidades locales y compartir su fe por toda la Argentina, ” según una nota de prensa del USCCB.
La organización dice que la colecta también permitió a 235 jóvenes de Haití participar en la Jornada Mundial de la Juventud 2019 en Panamá y escuchar las “palabras de esperanza y misericordia” del papa Francisco.
En noviembre de 2019, el Subcomité para la Iglesia en América Latina concedió casi $4.2 millones en fondos para apoyar a la Iglesia Católica de América Latina y el Caribe, incluyendo áreas devastadas por desastres naturales como huracanes y terremotos.